En un encuentro que amalgamó conocimiento, tecnología y el compromiso del sector productivo, se llevó a cabo la segunda Jornada Agtech de la Unidad Integrada Balcarce, organizada por la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP) y la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) INTA Balcarce.

La jornada contó con la participación de destacados investigadores, especialistas, empresas del sector y jóvenes interesados en las nuevas tecnologías aplicadas al ámbito agrario. Entre las actividades desarrolladas, se destacaron las salidas a campo y las demostraciones de integración de tecnologías, que permitieron a los presentes observar de primera mano el funcionamiento y la utilidad de las Agtech.

El decano de la unidad académica, Miguel Pereyra Iraola, expresó su agradecimiento a las empresas participantes, reconociendo el esfuerzo que implica su presencia en eventos de esta índole. Pereyra Iraola destacó el papel fundamental del campo y la agroindustria como motores del país.

El director de la EEA INTA Balcarce, Facundo Quiroz, resaltó el compromiso de diversas personas convencidas de que las tecnologías AgTech son parte integral del futuro del sudeste bonaerense. Tanto INTA como la FCA se posicionan como actores clave en el desarrollo y la implementación de estas tecnologías.

La jornada AgTech subrayó el valor de la innovación tecnológica en el sector agrario, evidenciando los avances del agro 4.0, que incluyen la digitalización de procesos, el monitoreo remoto y el análisis masivo de datos, entre otros. Este espacio no solo propicia mejoras en la calidad de vida de agricultores, profesionales y trabajadores del sector, sino que también brinda beneficios tangibles para los consumidores.

El rector de la UNMDP, Alfredo Lazzaretti, expresó su orgullo por la Unidad Integrada y la estrecha colaboración con el sector privado, en particular con el dinámico campo argentino, fundamental para el desarrollo nacional.

En resumen, la segunda Jornada Agtech de la Unidad Integrada Balcarce fue un rotundo éxito, consolidando el compromiso de la academia, el sector productivo y las instituciones gubernamentales en el impulso de tecnologías innovadoras para el sector agropecuario.